Habitantes de la población de Río Seco, en el municipio Miranda del estado Falcón, salieron a las calles para protestar por un nuevo derrame petrolero en el Golfete de Coro, una zona conocida por su intensa actividad pesquera. La comunidad, compuesta en su mayoría por familiares de pescadores, exige respuestas y acciones inmediatas ante la crisis ambiental que afecta su sustento
La directora nacional de Ambiente de Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa), Delhy Echevarreneta, es el foco de las críticas. Las protestantes denunciaron que en ocasiones anteriores, Echevarreneta minimizó el problema al referirse a los derrames como “sedimentos”. “Exigimos su renuncia, ya que parece desconocer el daño que el petróleo está causando a la fauna marina”, manifestó una de las afectadas.
Las mujeres, en su mayoría esposas de pescadores, expresaron su frustración y desesperación. “Observen el daño que están haciendo con la zona pesquera”, clamó una de ellas, enfatizando la devastación que los derrames han causado en su medio de vida.
El grupo solicitó una reunión urgente con las autoridades de Pdvsa para abordar la situación. De no recibir respuestas satisfactorias, advirtieron que intensificarán sus protestas y podrían obstaculizar la vía Falcón – Zulia, una arteria clave para la región. “Estamos cansadas. Nuestros maridos están cansados de venir y no poder pescar nada”, señalaron, reflejando el descontento que crece en la comunidad.
Los derrames petroleros no solo amenazan la economía local, sino que también representan un grave riesgo para el ecosistema del Golfete de Coro, un área vital para la biodiversidad marina. La situación plantea un desafío urgente tanto para las autoridades como para la industria petrolera, que deberá responder a las demandas de las comunidades afectadas y adoptar medidas efectivas para prevenir futuros incidentes.
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