El Congreso paraguayo dio un espaldarazo a la decisión del presidente del país, Santiago Peña, de romper relaciones con el gobierno de Nicolás Maduro y dar su apoyo al opositor venezolano Edmundo González Urrutia -quien reclama su triunfo en los comicios de julio.
En una sesión ordinaria celebrada en esta jornada, los 12 diputados y 6 senadores titulares que conforman la Comisión Permanente del Congreso, que ejerce las funciones legislativas durante el receso de fin de año de ese poder, discutieron y aprobaron dos proyectos de declaración relativos a Venezuela.
Según recogió Efe, la primera declaración se centró en el apoyo a «la firme determinación» de Peña de «reconocer la victoria del presidente electo legítimamente Edmundo González Urrutia»; mientras que la segunda se enfocaba en el respaldo a la «decisión de la República del Paraguay de romper relaciones diplomáticas con la República Bolivariana de Venezuela».
Maduro, un problema
En medio del debate, durante el cual los legisladores propusieron unificar las iniciativas, el diputado oficialista Alejandro Aguilera advirtió que la administración de Maduro «es un problema y un peligro para toda Latinoamérica».
Por su parte, el también diputado Adrián Vaesken, del opositor Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), se declaró a favor de «la defensa de la democracia y de las libertades», pero advirtió que el gobierno de Peña «parece ser que dice, haz lo que yo digo, pero no lo que yo hago».
Vaesken criticó, entre otros, que el gobierno del cartismo, como se conoce a la facción del Partido Colorado afín al expresidente Horacio Cartes, mentor político de Peña, «desde el principio» de su gestión «ha copado los organismos extrapoderes», «ha concentrado el poder de la República» y promovido leyes «leyes a medida», entre otras.
«Y nos quieren vender este cuento de que ellos (…) cuidan la democracia y las libertades», criticó el legislador, para quien el cartismo «se muestra autoritario», aunque descartó la posibilidad de que este país vuelva a vivir una dictadura como la de Alfredo Stroessner, que se prolongó entre 1954 y 1989.
A su turno, el diputado del oficialismo Santiago Benítez salió al paso de las críticas contra el Partido Colorado e indicó que ello «no evitará» el apoyo legislativo a la posición de Asunción frente a Caracas, «ni siquiera le resta mérito».
«Este Gobierno corresponde que apoye a Edmundo González Urrutia», defendió.
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