
Italia mantiene activos “todos los canales” para lograr la libertad del cooperante italiano Alberto Trentini, arrestado desde noviembre en Venezuela, aunque es un caso “complejo y de difícil solución”, advirtió este martes el subsecretario de Estado en la Presidencia del Consejo de Ministros italiano, Alfredo Mantovano.
“Estamos llevando a cabo todos los esfuerzos para facilitar su retorno” a Italia, dijo Mantovano, que no quiso facilitar detalles sobre el caso para evitar “riesgos” que compliquen las labores para su liberación.
Remarcó que Trentini está arrestado desde el pasado noviembre en Venezuela “por motivos no esclarecidos”, alertó de que la “situación compleja y de difícil solución” e insistió en que las autoridades italianas trabajan en ello a través de todas las vías posibles.
“Hemos activado todos los canales y confirmo a los padres (de Trentini) que estamos llevando a cabo todos los esfuerzos para que su regreso sea posible”, agregó el cargo gubernamental.
Trentini, que trabajaba como cooperante en Venezuela, fue detenido el 15 de noviembre, y durante dos meses se desconoció su situación, hasta que el Ministerio de Exteriores italiano recibió una confirmación de las autoridades venezolanas de que estaba arrestado.
“Hemos pedido que sea tratado con respeto y que se permita una visita consular”, explicó el pasado enero el ministro de Exteriores, Antonio Tajani, que aseguró que Italia se había puesto en marcha para lograr su liberación, junto con las tareas que realiza para liberar a otros italo-venezalos encarcelados en el país.

También en enero, Exteriores convocó al encargado de negocios de la embajada de Venezuela en Roma para “protestar enérgicamente por falta de información” sobre la detención de Trentini.
El cooperante trabajaba para la ONG ‘Humanity & Inclusion’ y fue presuntamente detenido en un control mientras viajaba desde Caracas hasta la ciudad de Guasdualito, según denunciaron sus familiares.
Los familiares del cooperante también expresaron su preocupación por el estado de Trentini, que además tiene problemas de salud que requieren el uso de medicamentos.
Todo ello sucede en medio de un clima de desavenencias diplomáticas entre Venezuela e Italia, que no reconoce a Nicolás Maduro como ganador de las elecciones de julio pasado.
En enero, la Cancillería venezolana ordenó a los gobiernos de Italia, Países Bajos y Francia limitar a tres el número de acreditados en ese país en respuesta a su “conducta hostil”. EFE
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.