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lunes, 3 de marzo de 2025

 


Pdvsa gasolina VOA



A pesar del leve incremento de la producción de petróleo en Venezuela aún no mejora de manera significativa la disponibilidad de gasolina y diésel. Hasta la fecha solo cubre 45% de la demanda interna. Por otra parte, la distribución de combustible continúa siendo desigual al destinarse a la Gran Caracas casi la mitad del inventario

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La producción de gasolina, gasoil y diésel en Venezuela sigue estancada y solo cubre 45% de la demanda en el mercado interno. Aunque Petróleos de Venezuela (Pdvsa) continúa importando combustible y materia prima para su procesamiento, el volumen sigue siendo insuficiente para eliminar las largas filas de vehículos en las estaciones de servicio, principalmente del interior del país.

Cifras aportadas por expertos petroleros y que provienen de la propia Pdvsa señalan que luego de las exportaciones y el pago con crudo de la deuda que tiene la empresa estatal con las petroleras extranjeras Chevron, Eni y Repsol, queda para procesar en el mercado interno un volumen de 150 mil barriles diarios (b/d), aproximadamente.

«A pesar de un incremento en la producción de crudo en los últimos seis años, que ha aumentado en un promedio de 110.000 barriles diarios, la meta de alcanzar el millón de barriles diarios sigue siendo un desafío debido a la falta de inversión, corrupción y el deterioro de la infraestructura petrolera venezolana. La industria necesita de miles de millones de dólares para recuperarse y alcanzar niveles de producción más altos», sostuvo William Hernández, analista petrolero.

Indicó que Venezuela continúa importando gasolina de Irán para tratar de cubrir la demanda de 4 millones de vehículos que existen actualmente en el parque automotor. «Cabe recordar que desde el 2013 Venezuela se convirtió en importador de gasolina y de aditivos, debido a la falta de inversión en las refinerías y la creciente demanda del mercado interno».

Hernández destacó además que de la disponibilidad de combustible que hay actualmente, 43% se destina solo a La Gran Caracas, es decir, zona metropolitana y aledañas. Esto significa que de los 150 mil b/d que se refinan, 64.500 b/d son para la parte central del país. De esta manera, las autoridades mantienen el privilegio de Caracas, la capital del país, de contar con suficiente suministro de gasolina.

Otros datos aportados por expertos petroleros como Juan Szabo señalan que la refinación promedio, en la semana que cerró el pasado viernes 21 de febrero, fue de 214 mil b/d, con un rendimiento para todo el país de 78 mil b/d y 74 mil b/d de gasolina y diésel, respectivamente. 

Indicó en su columna en La Gran Aldea que ha bajado la producción del crudo liviano y mediano necesario para las operaciones de mezcla crudo Merey-16 y como alimentación de la refinería de Puerto la Cruz.

«La producción de estos crudos ha mermado al extremo de requerir importaciones regulares de crudos livianos para complementar los de producción local. Por otra parte, la escasez de gas natural está obligando a la población a cocinar utilizando leña y carbón, mientras que la producción de petroquímicos en el complejo de Jose ha tenido que ser limitada por la falta de ese insumo», destacó Szabo.

«El Estado continuó con el racionamiento del carburante con 12 litros por mes en el 2024 y en el inicio del 2025. Las refinerías venezolanas padecen de problemas como desinversión, endeudamiento, desprendimiento de bienes de capital. Ya no tenemos el apoyo por razones que los venezolanos desconocemos de las refinerías de Aruba y Curazao, que provenían de disolventes para mejorar la calidad de gasolina», destacó Hernández.

Las últimas cifras oficiales sobre la disponibilidad de combustible fueron reportadas en mayo de 2024 por el entonces presidente de Pdvsa y ministro de Petróleo Pedro Rafael Tellechea (que continúa encarcelado y acusado por vender información estratégica y confidencial de la industria a entes extranjeros). Los datos señalaron que el consumo de gasolina estuvo sobre los 102.000 barriles diarios, volumen que está 50% por encima con respecto a la demanda de hace tres años. Igualmente, esta cifra representa un tercio del que había hace 10 años. En consecuencia, el promedio de demanda anual en cinco meses de ese año era de 97.100 b/d.

«Estamos atendiendo todas las necesidades de combustibles del país sin ninguna situación de riesgo y tenemos cubierta en 95% todas las estaciones de servicio con la logística que hoy tenemos», afirmó en esa oportunidad Tellechea en un evento organizado por Fedeindustria.

En el 2023, el año inició con varias fallas en la Unidad de Craqueo Catalítico de Amuay, por lo que en el primer trimestre llegaron de la estatal iraní 2 millones de barriles de condensado para diluir el petróleo venezolano. La distribución de combustible (gasoil) para los productores venezolanos, las refinerías venezolanas, para procesar gasolina en el primer semestre de ese año, llegó al 10% de su capacidad.

Sin embargo, no toda la gasolina importada proviene de Irán; también han llegado a los puertos de Pdvsa barcos con combustible desde España, como el tanquero Janine K de Repsol que arribó a la refinería El Palito desde la Coruña el pasado 22 de febrero, según información aportada por los portales especializados en navegación. También la norteamericana Chevron envió desde Houston, Texas, a su tanquero DAT Venus a mediados de este mes.

En Venezuela aún continúan las restricciones a la venta de la gasolina. El suministro de gasolina subsidiada, por ejemplo, se sigue llevando a cabo a través de un cronograma de acuerdo al número de placa. No obstante, también se aplica en algunos estados como Táchira la misma modalidad de venta para surtirse de gasolina a precio internacional, lo que genera incomodidad en la población.

A través del Sistema Patria se viene asignando un cupo de 120 litros de gasolina al mes que se vende a precio regulado. El subsidio de gasolina es de 95%, por lo que por un cupo de 120 litros el usuario debe pagar 3 dólares. Mientras que el litro del combustible en divisas es de 0,50 dólares.

¿Y los nuevos surtidores de gasolina?

Varios proyectos ha ejecutado Pdvsa para mejorar la disponibilidad y distribución de combustible, no obstante, esos planes han avanzado poco y otros han sido ineficientes.

En junio de 2024, por ejemplo, se presentaron nuevos surtidores de gasolina que permiten el auto despacho y a través de una pantalla táctil se podrán solicitar los litros exactos que requiera el vehículo. Se podrá cancelar con tarjetas de débito y crédito nacional e internacional en el propio surtidor, con código QR, con pago móvil y/o con punto de venta. Los equipos llegaron a Venezuela gracias a una alianza con el gobierno de China y cuentan con tecnología QR y reconocimiento facial e incluye todas las modalidades de pago disponibles. Igualmente disponen de una tecnología antiestática que favorece el uso del teléfono celular a través de una aplicación diseñada para una mayor eficiencia del servicio.

De acuerdo a lo informado por Pdvsa el pasado año, «ya habían llegado al país 850 de estos surtidores, los cuales serían instalados en una primera etapa en parte de las 1.800 gasolineras con venta de gasolina subsidiada y a precio internacional». Sin embargo, en un reciente recorrido por las bombas de gasolina se evidenció que faltan muchas por contar con el nuevo equipo y en las que se encuentran, aún no se permite el autodespacho.

Por otra parte, Pdvsa también adquirió a finales de 2023 un total de 450 gandolas de gasolina a China. De esa cantidad, 100 unidades fueron entregadas a la empresa estatal para su distribución en todo el país. Aunque representantes del sector de estaciones de servicio calificaron como «positivo» el incremento en la flota de transporte de combustible, advirtieron que aún el número es bajo para lo que requiere el mercado y la demanda de los venezolanos. Hasta la fecha se desconoce si arribó al país el resto de las gandolas compradas al gobierno chino.

Mientras que en el año 2022, Venezuela e Irán llegaron a acuerdos para mejorar la infraestructura de la refinería El Palito, para ese mismo año, por cierto, Irán envió a Venezuela unos 22 millones de barriles de petróleo y condensado, lo que convirtió a Venezuela en un país importador. La empresa iraní Nioec, que ha hecho el mantenimiento a El Palito desde 2022, informó a mediados de 2023 que en dos meses estaría operativa al 100%, sin embargo, los problemas continuaron y aún procesa menos de la mitad de su capacidad de producción de 140.000 b/d.

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