En los primeros meses del año, los usuarios de Corpoelec han expresado su descontento por los aumentos desproporcionados en las tarifas del servicio eléctrico. Según denuncias de ciudadanos en diversas regiones del país, las facturas de electricidad han mostrado incrementos alarmantes, afectando de manera significativa el presupuesto familiar.
En enero, el costo del servicio alcanzó los Bs. 1.224,76, lo que ya fue considerado un aumento considerable por muchos usuarios. Sin embargo, lo que causó aún más preocupación fue el nuevo ajuste en febrero, con una tarifa de Bs. 1.145,74, una cifra que continuó elevando el gasto mensual. Pero el golpe más fuerte llegó en marzo, cuando las facturas alcanzaron los Bs. 3.891,85, lo que representó un incremento abrupto y sin precedentes para muchos hogares.
La reacción de los usuarios ha sido de indignación, ya que consideran que estos aumentos no se corresponden con la calidad del servicio prestado. Muchos han señalado que, a pesar de los incrementos en las tarifas, el suministro eléctrico sigue siendo intermitente en varias zonas del país, lo que agrava aún más la situación.
A lo largo de los meses, se han hecho diversos intentos de contactar con Corpoelec para obtener respuestas sobre el motivo de estos aumentos, pero la falta de información clara y transparente ha alimentado la frustración de los consumidores.
Este panorama ha puesto de manifiesto la creciente preocupación por el costo de los servicios básicos en Venezuela, donde la inflación y la situación económica han golpeado fuertemente el poder adquisitivo de los ciudadanos.
Usuarios han instado a las autoridades a pronunciarse sobre el tema y a esclarecer los criterios aplicados para el cálculo de las nuevas tarifas.?
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